
La saga de películas Son como niños (Grown Ups, en su título original) se ha consolidado como una de las comedias más populares de los últimos años gracias a su humor ligero, su elenco repleto de figuras del entretenimiento y una fórmula que mezcla la nostalgia con la diversión familiar.
La primera entrega, estrenada en 2010, fue dirigida por Dennis Dugan y protagonizada por Adam Sandler, Kevin James, Chris Rock, David Spade y Rob Schneider. La trama gira en torno a cinco amigos de la infancia que se reúnen tras la muerte de su antiguo entrenador de baloncesto. A lo largo de la película, enfrentan los retos de la adultez mientras reviven momentos de su juventud, dando pie a una serie de situaciones cómicas y entrañables.
El éxito comercial fue rotundo: recaudó más de 270 millones de dólares a nivel mundial, lo que dio paso a una secuela lanzada en 2013. En esta segunda parte, los personajes se trasladan a vivir al mismo pueblo, lo que desencadena nuevos enredos entre padres, hijos y viejos rivales. Aunque la crítica fue mixta, el público respaldó la cinta y la convirtió en otro triunfo de taquilla.
Después de varios años de especulación, en 2024 se estrenó Grown Ups 3, reuniendo nuevamente al elenco original, con la excepción de Schneider. La película retomó el tono humorístico habitual, pero con una dosis más marcada de reflexión sobre el paso del tiempo y los cambios en la vida adulta. Aunque dividió opiniones, logró conectar con los fanáticos que habían crecido junto a los personajes.
Más allá de las risas, la saga Son como niños ha destacado por su enfoque en la amistad duradera, la familia y el valor de las relaciones auténticas. Su éxito se debe, en gran parte, a la química entre los actores principales, quienes además de compartir pantalla, mantienen una estrecha amistad en la vida real.
Con tres entregas que abarcan más de una década, la saga se mantiene como una referencia del cine cómico comercial estadounidense, recordando al público que, a pesar de las responsabilidades y el paso de los años, siempre se puede volver a ser “como niños”.