El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó este martes una solicitud al Tribunal Supremo para que permita a los agentes de la patrulla fronteriza cortar el alambre de púas instalado por Texas en la frontera con México, como medida para reducir la migración ilegal.
La procuradora general de Estados Unidos, Elizabeth Prelogar, instó al Tribunal Supremo a anular la orden de un tribunal de apelaciones que, el mes pasado, respaldó a las autoridades de Texas, prohibiendo a los agentes federales manipular el alambre, a menos que sea por razones de emergencia médica.
Prelogar explicó en la solicitud que la orden actual prohíbe a los agentes mover o pasar a través de obstáculos físicos desplegados por el estado que impiden el acceso a la misma frontera que deben patrullar.
El alambre de púas forma parte de las medidas adoptadas por el gobernador de Texas, Greg Abbott, como parte de la «Operación Estrella Solitaria» para frenar la migración ilegal. Otras medidas incluyen la instalación de una barrera flotante de boyas en el río Grande y el envío masivo de migrantes en autobuses a ciudades demócratas.
La semana pasada, el Gobierno de EE. UU. amenazó con demandar a Texas si implementa una nueva ley migratoria que criminaliza la entrada irregular de personas desde México, considerada como una de las leyes antiinmigrantes más estrictas en la historia del país.
En lo que va del año, las autoridades estadounidenses han registrado más de 2 millones de «encuentros» con migrantes en la frontera sur, la mayoría de ellos arrestos de personas que intentaron cruzar de manera irregular. La región experimenta un aumento histórico en el movimiento de personas, impulsado por la búsqueda de mejores oportunidades económicas y diversas crisis sociales y políticas en países de la región.
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