
Es conocido por todos que la producción de alimentos de comida rápida no es la más agradable de todas. Muchas personas prefieren no enterarse qué ingrediente contienen los platillos procesados que tanto se disfrutan, ya que, obtener cierto conocimiento de la comida que se consume en grandes cantidades a nivel mundial, podría desatar un escándalo.
Tal es el caso de la salsa de Kentucky Fried Chicken, la cual, gracias a un video que grabó uno de los empleados en Estados Unidos de la famosa cadena de comida rápida, se puede apreciar cómo es preparada la «deliciosa receta», además de los ingredientes que se usan, quitándole el apetito a más de uno que vio la grabación.
https://www.youtube.com/watch?v=5BwW8z4c9VU&ab_channel=KLH100
Lo primero, la base de la salsa es una pasta marrón hecha a partir de los restos de pollo que quedan en la freidora tras cocinar la carne, según se lee en el texto que acompaña al vídeo. A esta masa se le añade agua y un polvo blanco sin especificar, que podrían ser especias.
Tras remover todo este mejunje, el resultado es un líquido de color marrón clarito que se mete en el horno durante unos veinte minutos. Para concluir, se cuela y se deja enfriar en el frigorífico hasta que adquiere una textura espesa y gelatinosa.
Todo ello se reparte en unos botecitos con un tapón de color rojo, que son los que llegan a los consumidores finales del producto.
Este vídeo se ha hecho viral en TikTok y supera ya las 600 mil visualizaciones. Además ha recibido miles de comentarios expresando su rechazo y asegurando que nunca más volverán a comprar esta salsa.
Seguiremos informando / Con información de NPI