El colmo de la inseguridad y la impunidad se puede constatar en el mercado de la Julián Carrillo en el barrio de San Sebastián, ya que algunos “fierreros” comenzaron a vender “cachimbas” a plena luz del día y sin el mayor empacho ni pudor y ni qué decir de temor a la autoridad, ese no lo conocen.
Él tianguis, instalado en la calle Belisario Domínguez de la colonia Julián Carrillo, oferta además de frutas, verduras, ropa usada, fayuca, artículos robados y de dudosa procedencia, “cachimbas” que son pistolas de fabricación cacera utilizadas por pandilleros.
Este artefacto ha cobrado la vida de un buen número de personas pues aunque se piense que el proyectil no es disparado con tanta fuerza como el de una pistola convencional, el daño a órganos internos es considerable.
En San Luis Potosí la inseguridad ha alcanzado cifras inimaginables que a todos escandalizan excepto al gobernador, al alcalde y sus jefes policiacos quienes todo minimizan y atribuyen a “percepción”.
En el mercado negro potosino se puede conseguir no solo drogas de cualquier tiempo, sino también armamento del que se necesite o se tenga capacidad económica para comprar, esto ante la complicidad de las autoridades. Pero el colmo es que ahora en los mercados sobre ruedas se pueda conseguir “cachimbas” con la misma complicidad de las autoridades.
