Toyota reportó una caída del 37 por ciento en sus ganancias del trimestre abril-junio, al registrar 841 mil millones de yenes (5 mil 700 millones de dólares), frente a los 1.33 billones del mismo periodo del año anterior. La automotriz japonesa atribuyó el descenso principalmente a los aranceles impuestos por el presidente estadounidense Donald Trump, que le costaron 450 mil millones de yenes (3 mil millones de dólares) en su ganancia operativa.
Las ventas trimestrales aumentaron 3 por ciento hasta 12 billones de yenes (82 mil millones de dólares), con 2.4 millones de vehículos vendidos a nivel mundial, sin embargo, Toyota redujo su previsión de ganancias para el año fiscal que termina en marzo de 2026 a 2.66 billones de yenes (18 mil millones de dólares), por debajo de los 21 mil millones estimados previamente.
Analistas advierten que la firma podría ser una de las más afectadas por los aranceles entre los fabricantes globales. La compañía anunció además la construcción de una nueva planta en la ciudad de Toyota, prefectura de Aichi, que iniciará operaciones a principios de la década de 2030 y formará parte de su estrategia para mantener la producción nacional en tres millones de unidades anuales.
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