Viernes 13 de junio, Guadalajara, Jalisco.- Conocida como una bebida ancestral y refrescante originaria del occidente de México, el tejuino destaca por su proceso artesanal de fermentación del maíz y que da un dulce sabor al paladar.
Con un origen de hace aproximadamente siete mil años, el tejuino se elabora a partir de la fermentación de masa o atole de maíz con piloncillo, limón, sal y hielo, y contiene menos del 1% de alcohol, además de probióticos beneficiosos para la salud intestinal.
Comúnmente, el tejuino se consume en estados como Jalisco, Nayarit, Colima y Michoacán, aunque gran parte de su popularidad está en Guadalajara, lugar donde incluso se celebra el Día Municipal dedicado a esta bebida el 19 de marzo.
El proceso de elaboración puede durar entre dos y cuatro días, comenzando con la cocción y fermentación del maíz con piloncillo, seguido de la mezcla con jugo de limón, sal y hielo antes de su consumo. Esta bebida no solo es refrescante sino que también posee propiedades funcionales, ya que contiene bacterias ácido-lácticas que ayudan a limpiar el intestino y aportan probióticos benéficos para la salud humana.
