Ni porque ha sido un aliado incondicional de Morena, ni porque le han jurado amor eterno las veces que lo han paseado por San Luis Potosí y lo han apoyado en esos eventos a los que nomas acuden dos o tres personas; las diputadas federales plurinominales María Luisa Veloz Silva y Lidia Nallely Vargas Hernández dieron la espalda a Gerardo Fernández Noroña y al Partido del Trabajo que buscaba quedarse con la presidencia de la Mesa Directiva en el Congreso de la Unión.
Las diputadas potosinas, que llegaron a la curul por el efecto de López Obrador, traicionaron al PT y votaron a favor de que Dulce María Sauri Riancho, abanderada por el PRI, se convirtiera en la próxima presidenta. Al diablo la izquierda, al diablo las alianzas. Veloz Silva y Vargas Hernández reiteraron que el PRIMOR es una realidad y que, por acuerdos todavía desconocidos, se puede cambiar el sentido de un voto. Ni las veletas giran tan rápido.
Este miércoles, en el pleno legislativo luego de las luchas y marometas que se tuvo que aventar Noroña para quedarse con la presidencia de San Lázaro, la votación favoreció al PRI, dejando al PT vestido y alborotado pues, ni el apoyo que ha mostrado en otras ocasiones a favor de Morena le valió para que sus diputadas respaldaran su propuesta.
