Kiev y varias ciudades ucranias sufrieron la madrugada de este jueves uno de los ataques más intensos de Rusia en los últimos meses, con 598 drones y 31 misiles de diferentes tipos. El saldo preliminar es de 21 muertos, incluidos cuatro menores, y decenas de heridos, cerca de 40 hospitalizados.
El ataque afectó edificios de viviendas, un centro comercial, una guardería, la redacción del periódico Ukrainskaya Pravda, y sedes diplomáticas, según informó el alcalde de Kiev, Vitaly Klitschko. Las autoridades ucranias advierten que el número de víctimas podría aumentar debido a personas atrapadas bajo los escombros.
El presidente Volodymyr Zelensky condenó el ataque y pidió sanciones más severas contra Rusia, señalando que “escoge los misiles balísticos y no la mesa de negociaciones”.
La fuerza aérea ucrania logró neutralizar 563 drones y varios misiles, aunque se reportaron impactos directos en 13 lugares y daños en otros 26. Moscú reconoció el lanzamiento de un “ataque combinado” contra objetivos militares, sin referirse a los daños civiles, y aseguró haber destruido todos los blancos programados.
Seguiremos informando.
