México es famoso por sus paradisíacas playas en destinos turísticos como Cancún, Los Cabos o Puerto Vallarta, pero más allá de estos sitios concurridos existen joyas naturales que permanecen casi intactas. Dos de ellas son Playa Balandra, en Baja California Sur, y Playa Escondida, en Nayarit.
Playa Balandra, ubicada en La Paz, es conocida por su impactante paisaje de aguas cristalinas y arena blanca, rodeada de formaciones rocosas que crean una laguna poco profunda. Gracias a su estatus como área natural protegida, ha mantenido su belleza prístina, permitiendo a los visitantes disfrutar de un entorno sereno y ecológicamente preservado.
Por otro lado, Playa Escondida, también llamada Playa del Amor, se encuentra en las Islas Marietas, frente a la costa de Nayarit. Su acceso es limitado, ya que solo se puede llegar nadando a través de un túnel rocoso. Esta playa oculta dentro de una cueva abierta ha cautivado a viajeros de todo el mundo por su singularidad y belleza natural.
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