
Durante su mensaje semanal, el padre Jesús Priego, vocero de la Arquidiócesis de San Luis Potosí, informó que fueron mínimo tres quienes agredieron al padre Miguel Camacho, atacado a navajazos el pasado domingo 3 de noviembre en Tambaca. Uno fue el que la turba enardecida detuvo y linchó y los otros dos escaparon.
Según la información proporcionada por la Diócesis de Valles a la Fiscalía, esa noche, por lo menos tres sujetos ingresaron a la casa de la parroquia con la intención de robar. Al percatarse de la presencia del sacerdote lo atacaron en la cara, la espalda y en un costado. Luego de cometer su fechoría, huyeron del lugar; sin embargo, uno de ellos no pudo debido a la multitud que lo detuvo; de los otros dos se desconoce su paradero.
Sobre el linchamiento, el padre Priego comentó que, aunque ni él, ni la Iglesia, lo aplaude, lo aprueba o espera que suceda, puede entender el actuar de las personas. Señaló además que un delincuente se arriesga a que las personas actúen en defensa propia por la indignación de las personas. “Si las autoridades hubieran llegado a tiempo eso no hubiera ocurrido” finalizó.
Agregó que por ahora, el padre Miguel ya se encuentra fuera de peligro; no obstante, su estado es delicado y seguirá internado en el Hospital. Confirmó que la Diócesis vallense ya realizó la denuncia a la Fiscalía y espera que localicen pronto a los demás agresores.
Finalmente, aprovechó los micrófonos para denunciar que han notado en la Arquidiócesis un aumento en los robos a las parroquias en los últimos meses. Con este asalto, temen por la afectación a más párrocos, muchos de ellos, mayores de edad.