
Tras el fallecimiento del Papa Francisco, primer pontífice latinoamericano y una figura clave de la Iglesia Católica moderna, se ha registrado un notable aumento en el turismo religioso hacia los lugares más significativos de su vida. La plataforma Civitatis, especializada en excursiones en español, reporta un crecimiento del 30% en las reservas de tours en Buenos Aires y un aumento del 20% en Roma y el Vaticano, reflejando el interés global por seguir los pasos del Papa Jorge Mario Bergoglio.
En Buenos Aires, ciudad natal del Papa Francisco, los recorridos incluyen el Barrio de Flores, donde nació y creció, y la Basílica San José de Flores, lugar donde consagró su vida religiosa. También han cobrado relevancia la Parroquia San José del Talar y la Parroquia San Ramón Nonato, sitios donde ejerció una profunda labor pastoral y acompañó a comunidades vulnerables, convirtiéndose en paradas clave del circuito turístico espiritual local.
En Roma y el Vaticano, además de los tradicionales recorridos por la Basílica de San Pedro, los Museos Vaticanos y la Capilla Sixtina, ha crecido la demanda para visitar la Basílica de Santa María la Mayor, donde está situada la tumba sencilla del Papa Francisco. Su sepultura, ubicada en un lateral del templo, refleja la humildad que caracterizó su vida, con la única inscripción «Franciscus» y elementos simbólicos como la cruz del «buen pastor» y una rosa blanca en recuerdo a su devoción por santa Teresita del Niño Jesús.
Por último, en Asís, ciudad que inspiró su nombre papal, los turistas recorren la Basílica de San Francisco de Asís y el Sendero Franciscano, un itinerario natural y espiritual que rememora la vida y enseñanzas del santo, fuente de inspiración para el Papa Francisco en su compromiso con la humildad y los pobres. Juan Rossello, Country Manager de Civitatis México, destacó que su legado trasciende lo religioso, inspirando a viajeros de todo el mundo a conocer su historia y espiritualidad a través de estos recorridos.