Ciudad Valles, S.L.P.- La delincuencia no respeta ni a la Iglesia. En lo que va del año, se han presentado dos denuncias por robos en templos católicos de Ciudad Valles, ambos cometidos en las últimas semanas.
“Hoy debemos ser más cuidadosos. Antes se podía dejar la puerta abierta de una iglesia o una casa, pero ahora no. Tenemos que poner llave a todo y estar atentos, que los vecinos denuncien cualquier cosa rara…”, advirtió el obispo de la Diócesis de Valles, Roberto Yenny García.
El líder religioso contó que, durante sus visitas pastorales, ha visto capillas sin seguridad, sin cerrojos, sin ventanas seguras y sin cámaras que disuadan a los delincuentes. “Les he dicho que refuercen la seguridad. No podemos confiarnos, porque hay gente que no respeta ni lo sagrado”, lamentó.
Los robos recientes han sido principalmente de alcancías y cajas de limosnas, forzando las cerraduras. Por eso, el obispo pidió a las autoridades municipales que estos depósitos se vacíen con frecuencia, “para no darles tentación a los amantes de lo ajeno”.
Cuando se le preguntó si “ya no hay temor de Dios”, respondió riendo «hoy ya no hay respeto por muchas cosas, y tampoco por la Iglesia. Pero estos bienes no son míos, son de la comunidad y están consagrados a Dios. Robarlos es una ofensa a la fe y a la sensibilidad religiosa”.
Además, recordó que cuando alguien roba objetos consagrados, como un sagrario con el Santísimo, se considera sacrilegio y los responsables quedan excomulgados. “Cada parroquia debe ver cómo se cuida, desde cambiar candados hasta instalar cámaras. Y si no pueden, la diócesis buscará cómo ayudar, pero no podemos quedarnos con los brazos cruzados”, concluyó.
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