El 20 de mayo de 1967, un misterioso encuentro sacudió la tranquilidad del Parque Provincial Whiteshell, en Manitoba. Stefan “Steve” Michalak, un geólogo aficionado y mecánico industrial de Winnipeg, fue protagonista de uno de los incidentes OVNI más extraños y documentados en la historia de Canadá: el caso Falcon Lake.
Ese mediodía, mientras exploraba cerca del lago Falcon, Michalak observó dos objetos brillantes en forma de cigarro que descendían del cielo. Uno de ellos aterrizó a unos 45 metros de distancia sobre una roca plana, mientras que el otro permaneció suspendido brevemente antes de desaparecer en el horizonte.
Intrigado, Michalak se acercó al objeto en tierra. Lo describió como un disco metálico de unos 10 metros de ancho, con una cúpula superior y una superficie reluciente que reflejaba la luz solar. Un fuerte olor a azufre y un zumbido agudo llenaban el ambiente. A través de una abertura similar a una puerta, creyó escuchar voces apagadas en su interior.
Convencido de que era un aparato militar secreto, intentó comunicarse en inglés, polaco y alemán, sin obtener respuesta. Al tocar el fuselaje metálico, la superficie le quemó el guante y la mano. Segundos después, una ráfaga de aire caliente salió disparada desde una rejilla en el costado del objeto, empujándolo con violencia y prendiendo fuego a su ropa.
Michalak logró regresar a su hogar por sus propios medios y fue ingresado de urgencia al hospital con quemaduras en el pecho en un patrón que coincidía con la rejilla del objeto. Durante semanas, sufrió náuseas, pérdida de peso, fatiga y extrañas erupciones en la piel.
El caso atrajo la atención de múltiples agencias: la Real Policía Montada de Canadá (RCMP), las Fuerzas Armadas Canadienses y la Fuerza Aérea de Estados Unidos realizaron investigaciones conjuntas. El lugar del supuesto aterrizaje reveló niveles elevados de radiactividad y la ropa quemada de Michalak también dio positivo en pruebas de radiación. Pese a la rigurosidad de los estudios científicos y periciales, nunca se encontró una explicación concluyente.
Más de medio siglo después, el incidente de Falcon Lake continúa siendo un enigma. Figura en los archivos oficiales del gobierno canadiense y es considerado el avistamiento OVNI más sólido y respaldado con pruebas físicas en el país.
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