Ciudad de México.- La segunda marcha contra la gentrificación en la capital terminó con actos vandálicos perpetrados por un grupo de encapuchados, quienes causaron destrozos en estaciones del Metrobús y en el Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC), luego de que la manifestación transcurriera de forma mayoritariamente pacífica.
La movilización reunió a unas 600 personas, según autoridades. Se registraron tres atenciones médicas menores, incluida una mujer herida por una pedrada, sin necesidad de traslado hospitalario.
La protesta fue encabezada por pueblos originarios de Santa Úrsula Xitla, quienes exigieron la cancelación del megaproyecto inmobiliario de Fuentes Brotantes 134, al que acusan de provocar afectaciones sociales, culturales y ambientales.
Pese a los llamados a mantener una marcha pacífica, un grupo de jóvenes encapuchados intentó liderar el contingente. Al final, al no conseguirlo, protagonizaron actos de violencia tras la dispersión del grueso de los manifestantes.
A la altura del Metrobús Perisur, este grupo agredió a policías y posteriormente ingresó a Ciudad Universitaria, donde rompió cristales del MUAC, pintó casetas de vigilancia de la UNAM y vandalizó la librería Julio Torri. Las fuerzas del orden no intervinieron dentro del campus por no tener jurisdicción en el área.
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