
Cusco, Perú.— La designación de Machu Picchu como una de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo podría estar en entredicho. La organización New7Wonders advirtió que la continuidad del santuario inca en la lista depende de las decisiones que adopte el Gobierno peruano en materia de conservación y manejo sostenible del sitio arqueológico.
En un comunicado, la entidad señaló que las autoridades peruanas han recibido propuestas para implementar un plan estratégico de transformación, recordando que la distinción implica un compromiso compartido con la preservación bajo estándares internacionales.
Pocas horas después, el Ministerio de Cultura respondió de forma indirecta, afirmando que la Unesco es el único organismo competente en materia de patrimonio cultural y natural. La institución añadió que en julio pasado, durante la 47ª reunión del Comité de Patrimonio Mundial en París, se valoraron avances en la gestión de visitantes y el uso de herramientas de monitoreo en Machu Picchu.
En paralelo, la situación en la zona se complica. Miles de turistas quedaron varados debido a protestas que desde principios de septiembre bloquean el acceso ferroviario al santuario. Las manifestaciones surgieron por disputas relacionadas con la concesión de la ruta hacia el sitio arqueológico. Este martes, la Defensoría del Pueblo anunció un acuerdo temporal con dirigentes comunales y representantes de la empresa concesionaria para permitir el traslado de pasajeros hasta el 17 de septiembre por la mañana.
El Ministerio de Comercio Exterior y Turismo informó que se reunirá con gremios del sector para buscar salidas consensuadas. La Cámara de Turismo del Cusco, en tanto, alertó que la interrupción del servicio afecta gravemente la actividad turística local.
New7Wonders subraya que los problemas no son aislados, sino parte de una dinámica de larga data: presión por la masificación de visitantes, incremento de precios, denuncias sobre la venta de boletos, limitaciones en transporte y conflictos sociales en la región.
Machu Picchu, inscrito como Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco en 1983, recibirá en 2025 más de un millón y medio de visitantes, según estimaciones oficiales, cifra que igualaría los niveles récord alcanzados en 2019, antes de la pandemia.
Con información de CNN Latinoamérica