
Lando Norris (McLaren) se impuso este domingo en el Gran Premio de Hungría, resistiendo un feroz remate final de su coequipero y líder del campeonato, Oscar Piastri, para lograr su quinta victoria de la temporada. Fue un cierre electrizante en el Hungaroring donde McLaren alcanzó su victoria número 200 en la historia de la Fórmula 1.
Piastri cruzó apenas 0.698 segundos detrás, manteniéndose líder en el campeonato pero reduciendo la ventaja tras la derrota. George Russell (Mercedes) completó el podio, superando a Charles Leclerc (Ferrari), quien recibió una penalización de cinco segundos y cayó al cuarto lugar.
La estrategia de McLaren fue decisiva: Norris optó por una sola parada mientras sus rivales realizaron dos, lo que resultó clave en su velocidad final. El equipo califica la carrera como “casi perfecta” por su sincronización entre pista, neumáticos y paradas.
Por su parte, Lewis Hamilton tuvo uno de sus peores fines de semana con Ferrari: calificó 12° y terminó en la misma posición, calificándolo como “absolutamente inútil”. Incluso sugirió que el equipo debería “buscar otro piloto”.