El telescopio espacial James Webb ha detectado hielo de agua en el disco que rodea a HD 181327, una estrella joven con características similares al Sol y ubicada a 155 años luz de la Tierra. Este descubrimiento representa un avance significativo en el estudio de los sistemas estelares en formación.
HD 181327 se encuentra en una etapa temprana de su evolución, y su disco circundante compuesto por gas, polvo y hielo es el lugar donde podrían formarse nuevos planetas. La presencia de hielo de agua en esta región sugiere que los componentes esenciales para la vida podrían estar presentes desde las primeras fases del desarrollo planetario.
Científicos afirman que esta observación proporciona pistas valiosas sobre cómo el agua, uno de los ingredientes fundamentales para la vida tal como la conocemos, podría distribuirse en otros sistemas solares en formación. Además, ayuda a entender mejor los procesos que dieron forma a nuestro propio sistema planetario hace miles de millones de años.
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