Personal médico del Hospital General del ISSSTE en San Luis Potosí denunció una serie de abusos de autoridad y prácticas irregulares atribuidas a la directora del nosocomio, Sandra Medina, a quien acusan de favorecer a familiares utilizando recursos e instalaciones del instituto.
Los trabajadores señalaron que se encuentran en situación vulnerable al carecer de base laboral, lo que los coloca en riesgo de despido inmediato en caso de manifestar su inconformidad. Esta condición, afirman, ha sido utilizada como medida de presión para silenciar las quejas internas.
Entre las irregularidades expuestas se encuentra la asignación de guardias, suplencias e interinatos a su hermana, María Fernanda Medina Ulibarri, quien se encuentra en avanzado estado de embarazo, con el fin de garantizarle beneficios médicos y laborales en un corto plazo, mientras otros empleados con años de servicio siguen sin obtener estabilidad ni acceso a prestaciones plenas.
Además, denunciaron un caso reciente en el que la directora ordenó internar en el área de urgencias a su sobrina, María José Medina Camacho, con complicaciones ginecológicas. Pese a que no era derechohabiente, se evitó que firmara el pagaré correspondiente y se instruyó al personal para realizarle estudios a costa del instituto.
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