
Casi siete millones de pesos se gastó Xavier Nava en la compra de tres mil 812 nuevas papeleras que serían instaladas en diversos puntos de la ciudad con la finalidad de suplir las ya existentes. La intención, según se informó, era proporcionar mobiliario público más resistente y con mayor capacidad para atender la demanda que se registra, sobre todo, en el Centro Histórico, sin embargo, no pasaron ni dos semanas cuando las dichosas papeleras comenzaron a mostrar fallas.
Se supone que las nuevas papeleras cuentan con un cenicero fabricado en acero inoxidable y tienen una capacidad para 50 litros, es decir, más que las anteriores, además de que son 100% reciclables pero, lo cierto es que las nuevas papeleras resultaron peor que las ya existentes pues a escasos días de ser colocadas y a pesar de que hay muy poca presencia de visitantes en el centro de la ciudad, ya colapsaron, se rompieron o están tiradas en el piso. Son desechables.
Fue en febrero de este año cuando se informó sobre la intención de adquirir tres mil 812 nuevas papeleras, 800 para el Centro Histórico y el resto para los distintos sectores de la ciudad, cada una con un precio de 1824 pesos, es decir, en total se invirtieron seis millones 953 mil 88 pesos que, en cuestión de días, tal cual, se fueron a la basura.