En medio de la constante tensión por la inseguridad que azota al país, la reciente instalación de nuevas compañías de la Guardia Nacional en el Altiplano Potosino representa una acción relevante para reforzar la estrategia de seguridad en San Luis Potosí, sin embargo, este esfuerzo no puede limitarse a lo simbólico o meramente estructural. La sola presencia de instalaciones militares no garantiza la recuperación de la paz. Lo que realmente marcará la diferencia es la capacidad operativa con la que se dote a estas unidades. Ese será el verdadero rostro de las estrategias de seguridad.
Es positivo que haya gestiones para ampliar la cobertura territorial de la Guardia Nacional, sobre todo en zonas como Matehuala, donde se han registrado hechos violentos de alto impacto y en donde la población demanda respuestas urgentes y eficaces, pero también es preciso señalar que no basta con cortar listones o emitir comunicados triunfalistas.
Las instalaciones recién inauguradas (y las que se inaugurarán este mismo jueves 19 en Zaragoza) deben estar completamente equipadas; con armamento moderno, vehículos suficientes, tecnología de inteligencia y, sobre todo, personal debidamente capacitado. Estos factores, como se ha visto, han permitido que, en San Luis Potosí, la inseguridad vaya a la baja y eso que apenas se cuenta con los esfuerzos del Ejecutivo y de algunos municipios. Imaginen lo que se lograría todos jalaran parejo.
De nada servirá tener edificios nuevos si los elementos no cuentan con lo necesario para cumplir su labor. La seguridad requiere inversión sostenida, profesionalización y voluntad política que no se quede en la superficie, además, urge establecer mecanismos de supervisión ciudadana que garanticen que estas fuerzas actúen con apego a los derechos humanos y que su presencia no se convierta en un factor de tensión, sino de confianza.
También es relevante insistir en que la coordinación entre los tres niveles de gobierno debe ir más allá del discurso. El llamado a los alcaldes para que inviertan más en seguridad es válido, pero no puede dejar de lado el principio de corresponsabilidad que obliga al Gobierno Federal y al Estatal a ofrecer no sólo respaldo logístico, sino liderazgo estratégico.
El verdadero blindaje de San Luis Potosí no se logra con anuncios, sino con resultados y esos sólo serán posibles si las fuerzas de seguridad, tanto federales como locales, tienen, además presencia, un poder real de operación.
Cavilaciones:
Primera: Anoche, en Soledad de Graciano Sánchez, la senadora Ruth González tomó protesta al Comité Municipal del Partido Verde. El Gallardismo dio una muestra de fuerza en su lugar de nacimiento. También lucieron Ignacio Segura Morquecho, dirigente del partido, y el alcalde Juan Manuel Navarro, ambos fundadores del movimiento que hoy gobierna San Luis Potosí.
Segunda: Las instalaciones del Partido Acción Nacional (PAN) sufren de un lamentable deterioro; la pintura se cae a pedazos, las banquetas merecen una buena lavada y si usted ingresa, el interior está sucio y huele un poco a caño. A ver si la reelecta dirigente, Verónica Rodríguez, le da una manita de tocayo ¡Miau!
Tercera: El huracán Erick también traerá lluvias a territorio potosino. Tome precauciones.
