En una decisión judicial reciente, el gobierno de Estados Unidos anunció que no buscará la pena de muerte para Joaquín Guzmán López, hijo del conocido narcotraficante mexicano Joaquín «El Chapo» Guzmán, en caso de ser condenado por cargos de narcotráfico. Esta determinación fue presentada en una corte federal de Chicago el 23 de mayo, aunque los fiscales no proporcionaron detalles adicionales sobre la decisión.
Guzmán López, de 38 años y conocido como «El Güero», fue detenido en julio de 2024 tras entregarse voluntariamente a las autoridades estadounidenses en Texas. Actualmente enfrenta cargos por tráfico de drogas, lavado de dinero y posesión de armas de fuego, relacionados con su presunta participación en las operaciones del Cártel de Sinaloa, específicamente en la facción liderada por «Los Chapitos».
Durante su primera comparecencia ante el tribunal en julio de 2024, Guzmán López se declaró no culpable de los cargos en su contra. La jueza Sharon Johnson Coleman ordenó que permaneciera en prisión sin derecho a fianza, y la próxima audiencia está programada para el 2 de junio de 2025.
La decisión de no buscar la pena capital en este caso sigue la práctica habitual de Estados Unidos de proporcionar garantías a México de que no se aplicará la pena de muerte a ciudadanos mexicanos extraditados, en cumplimiento con el Tratado de Extradición entre ambos países.
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