
Miren, cabrones, ustedes no van a venir a manchar mi reputacion; soltó Xavier Nava a los regidores y al síndico del PAN citados expresamente para aclarar solicitudes de información sobre el uso de los recursos públicos que los panistas han hecho en los últimos meses a los funcionarios de Obras Públicas, Oficialía Mayor, Desarrollo Social y Tesorería.
Rojo de coraje, Xavier Nava reprochaba a los panistas que lo llevaron al poder. «No me chinguen, a mí no me van a decir corrupto». A su lado, el tesorero Rodrigo Portilla, hacía de sancho con una sonrisa nerviosa y las hormonas a toda revolución.
Afuera comenzaba el distanciamiento social. El día 20 de marzo de 2020, los regidores del PAN y el primer sindico atendieron un llamado del presidente municipal de San Luis Potosí. El tesorero, originalmente, no estaba considerado pero Nava quiso tener in testigo de confianza durante el encuentro.
Los regidores, por su parte, esperaban que el edil les explicara dónde están las 80 patrullas nuevas, de 100 que adquirieron, que no se han utilizado porque no hay personal ni recursos para destinar en gasolina, también creyeron que Marco Antonio Uribe, director de Obras Públicas, les entregaría los expedientes de las obras que ha asignado a sus amigos, a Tirzo González de Concrecer, Leopoldo Stevens, secretario de Obras del Gobierno, y los contratos que ha dado a Makirsa, a Sánchez Valdez y a todos los que le dan moche pero Nava no traía bajo el brazo los expedientes de las licitaciones, traía en la sangre irá, coraje y todas sus frustraciones que descargó contra sus compañeros de Cabildo.
Xavier Nava hablaba en defensa propia, en su atropellado discurso aseguró que no ha cometido ningún acto de corrupción y, mientras los regidores lo veían incrédulos, continuó «No meto las manos al fuego por los directores, desconozco lo que hacen» confesó exhausto.
Los regidores y el síndico dejaron que el edil se desahogara, que soltara todo lo que traía guardado, sutilmente, le hicieron recordar que, junto con él y gracias al PAN, forman parte del Cabildo responsable de la admiración de la ciudad.
Una de las regidoras encaró al alcalde y le dijo que si la reunión era para enfrentarlos y maldecirlos o para trabajar y enfrentar responsabilidades, Nava reaccionó y cambió su actitud, la reunión se prolongó por casi dos horas.
Los regidores traían mucho parque porque Xavier Nava ha dado la instrucción de despedir a empleados del Ayuntamiento que tienen hasta más de 20 años en la administración, hay una abierta persecución en contra de quienes tengan un elemento que los relacione con Juan Francisco Aguilar, presidente del PAN, con el diputado federal Xavier Azuara, y con los legisladores locales, Ricardo Villarreal, José Antonio Zapata, Rubén Guajardo y Rolando Hervert.
Xavier arqueó las cejas y Portilla entró al quite «Así es esto de la política» pero el antecedente lo sufrió de manera personal el síndico Víctor José Saldaña a quien Rodrigo Portilla le quitó personal, material y recursos de trabajo.
Según los científicos, la ecuación química cerebral de un coraje dura sólo 11 minutos, transcurrido ese tiempo, todos se calmaron, controlaron los ánimos y expusieron sus puntos de acuerdo y desacuerdo. Fueron 120 minutos de diálogo y se despidieron en paz.
Sin embargo, por la noche, cerca de las 23:00 horas, el regidor Christian Azuara recibió un mensaje intimidatorio de un número telefónico terminado en 72 en el que le advierten «Haber hijo dela verga bájale de huevos te vamos a partir la madre y te vamos a matar Aty y a toda tu familia pendejo infelis Sabemos a qué hora sales de tu casa y a donde vas Te voy a kortsr la cabesa Bájale de huevos con todo lo que andas disiendo Puto ya estas adbertido pendejo».
Seguiremos informando.