Dormir es una de las funciones más importantes para el bienestar físico y mental, pero no solo se trata de cuántas horas se descansa, sino también de cómo se duerme. La posición al dormir puede influir en la calidad del sueño, la salud de la columna, la digestión e incluso en la respiración.
Según especialistas en salud del sueño, la posición lateral, especialmente del lado izquierdo, es una de las más recomendadas. Esta postura mejora la circulación sanguínea, facilita la digestión y ayuda a reducir el reflujo gástrico, además, es ideal para personas con apnea del sueño leve o ronquidos. Algunos expertos recomiendan colocar una almohada entre las piernas cuando se duerme en esta posición.
Otra opción saludable es dormir boca arriba, ya que permite un alineamiento neutro de la columna y evita dolores de cuello y espalda. Sin embargo, no es recomendable para quienes roncan o tienen problemas respiratorios, ya que puede obstruir las vías aéreas.
Por el contrario, dormir boca abajo es la posición menos aconsejable, ya que obliga al cuello a girar y genera presión sobre la columna y los órganos internos, lo que puede provocar molestias musculares y problemas respiratorios.
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