
La divulgación de la ciencia se ha convertido en nuestro país en una de las herramientas más eficaces para tener científicos. La labor que realizan día a día los divulgadores tanto en salones de clases como en actividades ya calendarizadas a lo largo del año, son ya fundamentales a pesar del desdén presupuestal del que son objeto.
En nuestro estado, existen dos museos dedicados a la divulgación de la ciencia: El Museo Laberinto de las Ciencias y las Artes y El Museo del Meteorito, el primero ubicado en la capital potosina y el segundo en el municipio de Charcas.
Además de los museos, existen dependencias gubernamentales como el Consejo Potosino de Ciencia y Tecnología (COPOCYT) y el Instituto Potosino de Ciencia y Tecnología (IPICYT), que dentro de sus funciones se encuentra la divulgación de la ciencia. El Colegio de San Luis y la Universidad Autónoma de San Luis Potosí dentro de sus posibilidades también contribuyen a esta importante actividad.
Un referente importante es la red de Divulgación de Ciencia, Tecnología e Innovación (REDICITI) que depende del COPOCYT, en donde divulgadores de todo el estado se coordinan para hacer un esfuerzo conjunto en beneficio de la población al llevarles la ciencia a través de talleres, cursos y semanas de la ciencia.
En entrevista exclusiva para Código San Luis, Hugo Alberto Jasso Villarreal quien es maestro en Astronomía por la Western Sydney University, Sydney, Australia y licenciado en Astronomía por la Jamen Cook University de Australia . Además de docente de física, matemáticas por más de 40 años, nos comparte su experiencia en la divulgación de la ciencia en San Luis Potosí.
INFANCIA ES DESTINO
Según algunos pedagogos la infancia es el destino de los adultos al hablar sobre sus preferencias en todos los ámbitos. Así le sucedió a Hugo Alberto Jasso Villarreal quien recuerda que todo inicio con un libro que le regaló su papá. “Tenía como seis años, traía un mapa del cielo. Me gustaba salir con ese mapa y me ilusionaba encontrar las constelaciones, nunca encontré nada, ni identifique nada, pero ese libro abrió mi interés en la astronomía. De la astronomía, yo quise ser astrónomo, y lo logre. Pero estoy dedicado a la divulgación de la ciencia. La búsqueda de la gente que pueda contribuir con este campo de la ciencia”.
Potosino de nacimiento y como él orgullosamente refiere del Barrio de Tequisquiapan, a su paso por la entonces llamada Escuela de Física de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí tiene un afortunado encuentro con el doctor José Refugio Martínez Mendoza, alias Flash.
“Con él me acerque a realizar divulgación. Me acuerdo que con él hicimos el Primer Encuentro Nacional de Estudiantes de Física. Bajo su dirección desempolvamos unos instrumentos que estaban en los laboratorios muy antiguos, unos gabinetes científicos que se compraron en el tiempo de Porfirio Díaz y que se repartieron por todo el país y San Luis Potosí tenía uno. Fue pulir instrumentos de bronce y ahí me intereso completamente la divulgación de la ciencia”.
LA DIVULGACIÓN DE LA CIENCIA Y SU COMPROMISO
“Al principio consideraba que era muy sencillo ir a las primarias a platicarles de astronomía. Era un tema que les interesaba mucho y que la idea es la de aprovechar el morbo para traducirlo en curiosidad científica. Durante mucho tiempo fui docente en mi querido Colegio Minerva y ahí en el bachillerato ideamos un proyecto”, aseguró Hugo Alberto Jasso.
“En ese tiempo daba yo la materia de cosmografía, ese programa me permitió abrir una serie de clases en la tarde, donde las religiosas del Colegio Minerva me apoyaron, y armamos un grupo que se llamó Taller Infantil Astronómico (TIA) y después se transformó en Taller Infantil de Física Espacial (TIFE), que sobrevive hasta la fecha, ya cumplió 32 años”.
“Empecé a ver que no nada más era el entusiasmo, había que ver a qué público se dirigía toda la parte pedagógica. No era lo mismo platicar de astronomía a niños de preescolar que niños de primaria. Invitamos a gente de pedagogía a la maestra María Antonieta García Rivas que es docente, hubo otro docente Edgar Manilla y el Taller Infantil de Física Espacial (TIFE) desde entonces sigue.
“Actualmente hay que meterse a las corrientes teóricas del pensamiento de la divulgación, hay muchas corrientes como divulgadores”.
LOS MUSEOS DE CIENCIA Y SU FUNCIÓN
Para el astrónomo Jasso Villarreal quien también fungió como Coordinador de Divulgación del Consejo Potosino de Ciencia y Tecnología (COPOCYT) desde el 3 de junio de 1997 al 15 de agosto del 2000, los museos de ciencia en la visión positivista de la divulgación son fundamentales pero se fueron transformando.
“La visión que tenía el Museo Papalote y Universum de tocar, de ver, de sentir, de extender los sentidos fueron cambiando. Afortunadamente en el Museo Laberinto de las Ciencias y las Artes, surgió en esa corriente dentro de la visión del doctor José Luis Morán López que fue el principal impulsor de ese museo. Ahora han surgido más museos de ciencia, con más o menor éxito, dependiendo las administraciones y ese es el gran problema de los museos, algunos son de administraciones municipales y otros post pandemia, han sufrido los embates de la cortedad de visión política”.
“Son muchos factores que limitan el trabajo de un museo de ciencia. El factor económico, no llega el recurso a los museos, y las visiones en esta administración a nivel federal no le dan la importancia a la ciencia y a la tecnología, desaparición de fondos, transformación de recursos, esperemos que con la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo cambie en ese sentido, al igual que con la administración estatal ha faltado visión”.
LA RELEVANCIA DEL TALLER INFANTIL DE FISICA ESPACIAL
Hugo Alberto Jasso Villarreal a quien se le otorgó el Premio Estatal de Divulgación Científica 2023, refiere que a él le toco participar en la Primera Semana Nacional de Ciencia y Tecnología, antes de que la tuviera CONACYT aquí en San Luis la administraba la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, que hacia un esfuerzo impresionante.
“Trabajaba a puertas abiertas, los chiquillos platicaban con los investigadores y la UASLP facilitaba todo ese ejercicio. Con el pasar del tiempo, hay otras instituciones como el IPICYT, el Colegio de San Luis que abren sus puertas a que la gente conozca el quehacer científico y académico, es muy importante. Cuando estoy en el IPICYT, en el departamento de divulgación, el setenta por ciento de los estudiantes de posgrado, llegaron por una actividad de divulgación de la ciencia no por la escuela formal, quien lleva a la academia en ciencia y tecnología, es la divulgación”.
“Hay grupos que no pertenecemos a las instituciones, somos grupos independientes que curiosamente durante mucho tiempo fuimos el soporte de la divulgación, porque a las instituciones se les recorto el presupuesto y para divulgación, sobre todo en el sexenio anterior ya no confiaban en la divulgación, entramos a apoyar los grupos independientes.
“Nosotros tenemos un grupo independiente llamado Taller Infantil de Física Espacial (TIFE), pertenecemos a la red de Divulgación de Ciencia, Tecnología e Innovación (REDICITI) , la manejaba hasta hace poco el COPOCYT, el Consejo Potosino de Ciencia y Tecnología pero por la presión de los recursos se tuvo que hacer independiente , entonces tenemos un grupo de muchos divulgadores que pertenecen a varias instituciones que estamos en comunicación y hacemos nuestros programas de divulgación, nos invita por ejemplo un grupo hacer trabajos en San Miguelito, otro está en Ciudad Valles otro en Tamazunchale, y existe comunicación muy efectiva”.
“Cuando son instituciones las que organizan las actividades basta con dirigirse con sus direcciones de divulgación, en el caso de los divulgadores independientes no tenemos ningún recurso, algunos trabajamos de manera gratuita, las escuelas nos invitan a participar en sus actividades, o quieren algún taller o que abordemos algún tema, algunos otros de los grupos tenemos que cobrar alguna pequeña cuota de recuperación para poder solventar los gastos del material que se entrega. Se tendría que buscar el contacto con el COPOCYT, el contacto con el doctor Edgar Jiménez Félix que tiene todo el catálogo de todos los grupos de divulgación a nivel estatal con sus direcciones y páginas para que el público pueda conocer la oferta en divulgación a nivel estatal”.
Finalmente el divulgador de la ciencia recomendó a los padres de familia que cuando los niños quieren temas de ciencia y tecnología hacerles caso, acercarse a los museos, a las instituciones de investigación, ver que están ofreciendo, las casas de barrio, las actividades de la secretaria de cultura, en las redes sociales buscar a grupos de divulgación científica, la primera es la búsqueda. La segunda incentivar el interés de la divulgación, pedir en las escuelas y en los colegios actividades, ya en los colegios saben con quién dirigirse.