El choque del buque escuela Cuauhtémoc contra el puente de Brooklyn en Nueva York se debió a condiciones meteorológicas adversas más que a un error humano, afirmó José Manuel Urreta Ortega, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria del Transporte Marítimo (CAMEINTRAM).
Según el dirigente, el navío perdió propulsión y quedó a merced de fuertes corrientes y viento. Además, el remolcador que asistía la maniobra lo dejó a la deriva. Urreta explicó que este tipo de incidentes son parte del riesgo inherente a la navegación, incluso cuando se siguen los protocolos internacionales.
Destacó que tanto la Secretaría de Marina como la Coordinación General de Puertos y Marina Mercante supervisan el cumplimiento de normas de seguridad en todas las embarcaciones, nacionales y extranjeras.
El líder marítimo subrayó que factores como mareas, corrientes o ráfagas de viento pueden alterar maniobras, a pesar de contar con personal especializado y apoyo técnico. Finalmente, recordó que autoridades de Estados Unidos ya iniciaron una investigación sobre el percance.
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