Ciudad Valles, S.L.P. — A un año y seis meses del rescate de más de una decena de perros y gatos en condiciones deplorables en un domicilio de la colonia Márquez, la justicia continúa siendo una promesa incumplida. La abogada del caso, Linda Parra Espinoza, denunció que, pese a que el caso ya fue judicializado, no se ha concretado ninguna audiencia de imputación.
El desinterés de la Defensoría de Oficio del Estado ha sido evidente: el abogado asignado en la primera audiencia desconocía el caso; el segundo se fue de vacaciones durante un mes; y la tercera defensora recién asignada necesita tiempo para revisar la carpeta. En total, cuatro audiencias han quedado suspendidas sin avance alguno.
Mientras tanto, el sujeto ha reincidido en la acumulación de animales, manteniéndolos en condiciones insalubres que generan olores, enfermedades y muerte de las mascotas. Lo más preocupante, advierte la abogada, es que su comportamiento ha escalado hasta la agresión verbal contra humanos, incluyendo a una testigo del maltrato animal.
“¿Creen que no hará daño a una persona vulnerable? Cuando no le da satisfacción hacerlo con animales, lo siguiente podrían ser grupos vulnerables. Los hechos son graves y la Defensoría de Oficio debe asumir su responsabilidad”, señaló Parra Espinoza.
La comunidad exige acción inmediata, capacitación del personal de la Defensoría y que se impulse la imputación del delito, antes de que la impunidad derive en tragedias mayores. Este caso, además, recuerda otros incidentes trágicos, como el de Chihuahua, donde un menor que comenzó maltratando animales terminó agrediendo a un niño.
Recordemos que todo comenzó en marzo de 2024, cuando vecinos alertaron sobre 15 perros y decenas de gatos en condiciones deplorables, algunos ya fallecidos, en un domicilio que se convirtió en un foco de infección. Los rescates fueron posibles gracias a la acción de defensores de animales, policía y autoridades judiciales, pero hasta ahora, la apatía y los retrasos en la Defensoría de Oficio han dejado al agresor en libertad, mientras los vecinos siguen sufriendo los efectos de la negligencia.
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