Con una exhibición de autoridad y contundencia, Cruz Azul goleó 5-0 al Vancouver Whitecaps en la final de la Copa de Campeones de la Concacaf, consiguiendo así su séptimo título en esta competencia y empatando al América como el máximo ganador histórico del torneo.
El Estadio Olímpico Universitario fue el escenario de una auténtica fiesta celeste, donde los aficionados ovacionaron al equipo y al técnico Vicente Sánchez, quien pese a los rumores sobre su posible salida, celebró con emoción esta victoria que podría ser su última al mando de La Máquina.
Ángel Sepúlveda fue la gran figura del partido y del torneo, firmando un doblete en la final para llegar a nueve goles y coronarse como campeón de goleo por primera vez en su carrera. Su primer tanto llegó tras una barrida dentro del área que superó al arquero Yohei Takaoka, y luego selló su actuación con un certero cabezazo que se incrustó en las redes del conjunto canadiense.
Además de Sepúlveda, anotaron Ignacio Rivero, quien aprovechó una recuperación de Carlos Rotondi para abrir el marcador, Lorenzo Faravelli y Mateusz Bogusz, que ampliaron la ventaja antes del descanso, dejando el partido prácticamente sentenciado al medio tiempo con un 4-0.
Este título representa un bálsamo para Cruz Azul, que ha tenido dificultades en el torneo local en temporadas recientes. La conquista de la Concachampions no solo devuelve la gloria internacional al club tras 11 años, sino que también asegura su participación en la Copa Intercontinental 2025 y en el Mundial de Clubes 2029, donde podría enfrentar a los campeones de la Copa Libertadores y la Champions League.
