La noción de que debemos hacer popó todos los días es un mito arraigado que, según los expertos, carece de fundamento científico. La Dra. Folasade May, gastroenteróloga y profesora asociada de la Facultad de Medicina David Geffen de la Universidad de California en Los Ángeles, señala que no existe un número fijo o normal de deposiciones.
«La mayoría de la gente defeca entre tres veces al día y tres veces a la semana», afirma el Dr. Michael Camilleri, consultor y profesor de la Clínica Mayo de Minnesota, desmitificando la idea de que la salud está vinculada a la frecuencia diaria de las evacuaciones intestinales.
La forma, consistencia y apariencia de las heces son indicadores más fiables de la salud digestiva que la frecuencia en sí misma. Los expertos utilizan la Tabla de heces de Bristol para evaluar las deposiciones y determinar su calidad.
Más allá de la frecuencia, varios factores influyen en los hábitos intestinales, como la dieta, la hidratación, el estrés, la edad y los medicamentos. Por ejemplo, la falta de fibra, la deshidratación y el sedentarismo pueden contribuir al estreñimiento, mientras que el estrés puede causar estreñimiento o diarrea.
Para mejorar la regularidad intestinal, los expertos recomiendan aumentar la ingesta de fibra, mantenerse hidratado, hacer ejercicio regularmente y adoptar posturas más naturales en el inodoro para facilitar la evacuación.
En última instancia, la clave para una salud digestiva óptima radica en comprender y respetar las necesidades individuales de cada persona, y consultar a un médico si se experimentan cambios significativos en los hábitos intestinales o si se presentan síntomas preocupantes.
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