El estreñimiento es un malestar digestivo común que puede afectar la calidad de vida. Para prevenirlo o aliviarlo, es clave adoptar algunos hábitos saludables. En primer lugar, es fundamental aumentar el consumo de fibra a través de frutas, verduras, legumbres y cereales integrales. Estos alimentos favorecen el tránsito intestinal.
También es importante mantenerse bien hidratado: beber al menos 1.5 a 2 litros de agua al día ayuda a ablandar las heces. Realizar actividad física de forma regular estimula el movimiento del intestino, por lo que caminar, nadar o practicar yoga puede ser de gran ayuda.
Otro consejo útil es establecer horarios regulares para ir al baño y no ignorar la necesidad de evacuar. Si el problema persiste, es recomendable consultar a un profesional de la salud para descartar causas subyacentes o recibir orientación adecuada.
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