En respuesta a la actual crisis del agua que afecta principalmente a la Zona Metropolitana de San Luis Potosí, el Consejo Hídrico Estatal, encabezado por su presidente, Jonathan Abraham Quintero García, ha presentado un diagnóstico de ocho puntos para comprender la gravedad de la situación. El diagnóstico revela que la impermeabilización del poniente, que incluye parte de la Sierra de San Miguelito, es uno de los principales factores que contribuyen a esta problemática.
Aunque el Consejo Hídrico Estatal asegura que el estado aún no se encuentra en una situación de «Día Cero», en la que no se cuenta con suficiente agua para satisfacer las necesidades básicas de la población, advierte que si no se toman medidas urgentes, se enfrentará a una crisis profunda e irreversible en el mediano y largo plazo. Uno de los consejeros, Édgar Hilario Piña Hernández, ha alertado sobre la existencia de un mercado negro de agua y pozos clandestinos que deben ser regulados. Esta agua, que se comercializa sin haber sido evaluada en cuanto a su calidad, representa un riesgo para la salud de las personas.
«Es crucial regular el mercado negro y los pozos clandestinos debido a los riesgos que representan para la salud pública. El agua que se comercializa en este mercado alternativo no ha sido evaluada en cuanto a su calidad y ha tenido importantes efectos negativos en la salud de las familias», afirmó el consejero Piña Hernández.
El objetivo del Consejo Hídrico Estatal es crear un plan de gestión que garantice el suministro de agua a mediano y largo plazo, tomando en cuenta todos los factores involucrados y evitando soluciones a corto plazo que no aborden de manera integral la problemática. Además, se hace un llamado a priorizar la protección del medio ambiente, permitiendo que los ecosistemas recuperen su equilibrio natural. Asimismo, se busca asegurar el suministro de agua a la población de manera controlada, evitando la sobreexplotación del acuífero y reduciendo el alto consumo en actividades recreativas e industriales.
