Con la llegada de los primeros frentes fríos, el ambiente se llena de aromas que invitan al descanso y a las bebidas calientes. Nada representa mejor esta temporada que una taza de chocolate con leche, ese clásico reconfortante que ha acompañado los días nublados de generaciones enteras.
Además de ser un símbolo del invierno mexicano, el chocolate caliente guarda una tradición que combina historia, sabor y calidez. Prepararlo en casa no solo es sencillo, sino que permite disfrutarlo con el toque personal de cada quien: más espeso, más dulce o con un toque de canela.
🍫 Receta tradicional de chocolate con leche
Ingredientes:
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1 litro de leche entera (puede sustituirse por leche vegetal)
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1 tableta de chocolate de mesa (aprox. 90 g)
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1 rama de canela (opcional)
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1 cucharadita de vainilla
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Azúcar al gusto
Preparación:
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En una cacerola, calienta la leche junto con la rama de canela a fuego medio.
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Cuando empiece a humear, agrega la tableta de chocolate troceada.
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Remueve constantemente hasta que el chocolate se derrita por completo.
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Añade la vainilla y el azúcar, ajustando la dulzura a tu preferencia.
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Bate vigorosamente (puedes usar un molinillo tradicional o un batidor de mano) hasta obtener una ligera espuma.
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Sirve bien caliente y disfruta acompañado de pan dulce, galletas o tamales.
El chocolate con leche no solo calienta el cuerpo: también evoca memorias familiares, sobremesas y tardes tranquilas. Con el descenso de la temperatura, esta bebida se convierte en una tradición indispensable en hogares, cafeterías y escuelas.
Así que, con las mañanas más frescas y las noches más largas, ha llegado el momento perfecto para rescatar esa olla de barro y preparar el primer chocolate caliente de la temporada. Porque el frío apenas comienza… y una taza humeante siempre será la mejor compañía.
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