En política, lo inesperado es el pan de todos los días, y en este caso, muy al estilo potosino, quienes echaban campanas al vuelo en el proyecto de Xavier Nava tendrán mucho de que preocuparse ante una embestida no vista ni anticipada por sus seudo estadistas políticos.
No es la primer vez que se ve reunidos en cafés tanto de la Ciudad de Mexico, como de San Luis, a personajes de la izquierda amarilla con los verdes, y a los verdes con los de izquierda morenista; quienes, hasta donde sabemos, estarían fraguando un bloque por la gubernatura potosina que dejaría desde este momento descobijado al gobernador Juan Manuel Carreras, próximamente fugado a su Secretario de Gobierno, y vestido y alborotado a Xavier Nava, y con un PRI desvencijado ante el proyecto 2021.
La reaparición de Manuel Barrera como Secretario Nacional del Verde y la separación de Ricardo Gallardo Cardona del PRD no es algo separado, y mas cuando se sabe que hay una alianza nacional en las elecciones estatales para con Morena.
Por otro lado, la desaparición de Nueva Alianza y el poco flujo electoral de Conciencia Popular, dan pocas esperanzas a un PRI donde Nacho Acosta y Alejandro Leal Tovias “Caco” terminarían de enterrar con las pocas posibilidades de lograr triunfos electorales, dando prácticamente muerte a su proyecto político a modo de suicidio consentido por quien confía a ciegas en ellos, su Gobernador.
Por ello, lo que se puede esperar de la alianza frankenstein de izquierda verde-amarelo, es un monstruo difícil de parar, que, de llegar a fraguar la elección de la mano de Lopez Obrador, tendrían una gubernatura mas en sus estadísticas de Mexico, y en San Luis un cobradero de facturas a quienes usaron las instituciones publicas y medios de comunicación a su servicio para golpetear precisamente, a los que están por tomar el próximo Gobierno.
Colaboración especial.
