Este medio día, el arzobispo Jesús Carlos Cabrero presidió la misa dominical en la cual se hizo referencia a la epifanía de los Reyes Magos (Sabios de Oriente según las sagradas escrituras) que, guiados por la Estrella de Belén, llegaron al pesebre donde se encontraba el Niño Dios para honrarlo con regalos preciosos como el oro, la mirra y el incienso.
Ante este pasaje religioso, el padre pidió a los feligreses que en este comienzo de año se regalen así mismos el cumplimiento de sus propósitos, mismos que deberán estar bajo el deseo de mejorar y cambiar para ser mejores personas y mejores ciudadanos y, así, “salir de estos baches donde los hacen unos para que tropiecen otros”.
Jesús Carlos Cabrero comentó que la gente tendrá que aprender de los errores cometidos el año pasado, ya que en esta nueva oportunidad que Dios nos da, podremos revertir la situación negativa en la que nos pudiéramos encontrar, saliendo adelante sin desanimarnos.
El máximo jerarca de la Iglesia Católica insistió en el tema de la inseguridad, donde aseguró estar en desacuerdo en apostarle a las armas este 2020, ya que preferiría invertir más en la educación para mejorar su calidad, “nuestros gobiernos no dan signos de preocuparse por la educación”.
Así mismo, el arzobispo afirmó que la educación es el principal pilar para que una sociedad funcione de buena manera, donde el hombre puede conocer sus capacidades, sus dones, sus alcances, “la violencia es la ignorancia de la posibilidad de que se puede obtener una buena calidad de vida con otros métodos, alejados totalmente de la violencia”, aseguró.
Finalmente, el sacerdote sigue lamentando la violencia que se genera contra las mujeres, espera que se siga trabajando en revocar el criterio negativo que todavía muchos varones tienen y que lastima a las mujeres, donde el principal punto de partida se encuentra en el hogar, educando a los niños para evitar que crezcan con la idea machista que por años ha permeado en la sociedad mexicana.
Seguiremos informando
