Cáritas de San Luis Potosí reunió y envió una importante cantidad de apoyos para las familias afectadas por las recientes lluvias en la región Huasteca, particularmente en Tamazunchale, donde más de un centenar de hogares resultaron severamente dañados tras el paso del huracán Barry.
Desde temprano, voluntarios y personal de la organización trabajaron en la clasificación y empaque de los donativos, entre los que se incluyeron colchones, alimentos no perecederos, productos de higiene personal, artículos de limpieza, ropa, cobijas y utensilios básicos para el hogar. También se reunieron artículos infantiles, como leche en polvo, cereales, galletas y sopas instantáneas, destinados a apoyar a las familias que lo perdieron todo.
El apoyo fue posible gracias a la respuesta solidaria de la población potosina, que atendió el llamado de Cáritas para colaborar con esta campaña especial. Todo el cargamento será enviado a comunidades de la Diócesis de Valles, una de las más afectadas por las inclemencias del clima.
Además de esta entrega, Cáritas reiteró que mantiene sus puertas abiertas para continuar recibiendo donativos, no solo para situaciones de emergencia, sino también para sostener sus distintos programas de atención a poblaciones vulnerables, como migrantes, adultos mayores y personas en situación de pobreza.
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