Ciudad Valles, S.L.P. – En menos de quince días, tres unidades de la empresa Autobuses Vencedor se incendiaron en distintos puntos de la Huasteca, lo que desató preocupación sobre el estado de la flotilla y la falta de medidas de seguridad en el transporte público.
El primer siniestro ocurrió el pasado 14 de agosto, cuando un autobús que circulaba por la carretera de cuota Rayón–La Pitahaya comenzó a sacar humo tras una pequeña explosión en el motor. A bordo viajaban alrededor de 20 pasajeros y dos choferes, quienes lograron evacuar a tiempo junto con su equipaje. Aunque no hubo lesionados, la unidad quedó completamente calcinada.
El segundo hecho se registró el 20 de agosto en el bulevar México–Laredo, en Ciudad Valles, frente al Asilo de Ancianos. Una unidad del servicio urbano ardió en llamas y el chofer huyó de la escena, presuntamente obedeciendo órdenes de la empresa para evadir responsabilidades. El incendio alcanzó árboles cercanos y obligó a evacuar a adultos mayores del albergue, poniendo en riesgo sus vidas. Bomberos, Protección Civil, Policía Municipal, Guardia Nacional y la Comisión Nacional de Emergencia trabajaron para sofocar el fuego. Hasta ahora, no se han dado a conocer las causas oficiales del siniestro.
El tercer percance ocurrió la noche del 28 de agosto, cuando un autobús color verde recién salido de talleres mecánicos se incendió en la entrada a Ciudad Valles, sobre la carretera a Rioverde. En la unidad solo viajaba el chofer y, pese a la rápida reacción de cuerpos de auxilio, la unidad fue consumida por el fuego.
Estos hechos han encendido las alertas sobre la falta de mantenimiento, ausencia de extintores y presuntas negligencias de la empresa, que de acuerdo con la normativa deberían ser supervisadas por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y autoridades federales. Especialistas advierten que, de no corregirse, estas fallas podrían desencadenar una tragedia con consecuencias irreparables.
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