Al menos 26 personas, entre ellas mujeres y niños, murieron el lunes en el noreste de Nigeria tras la detonación de artefactos explosivos improvisados en una carretera entre Rann y Gamboru, en el estado de Borno, informó la policía.
El grupo extremista Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP) se atribuyó el ataque, que destrozó varios vehículos comerciales, incluido uno que transportaba agricultores y comerciantes locales. Al menos tres personas resultaron heridas.
Los explosivos fueron colocados por presuntos militantes en zonas dañadas de la vía, una táctica común para atacar a fuerzas de seguridad. La región ha sido golpeada por años de violencia yihadista, que ha dejado más de 35,000 muertos y dos millones de desplazados, según la ONU.
Las autoridades aseguraron el área y comenzaron operaciones de limpieza. El mismo martes, el Ejército nigeriano nombró al general Abdulsalam Abubakar como nuevo comandante en la lucha contra los grupos extremistas.
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