La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente aseguró una cacatúa de las Molucas en el Aeropuerto Internacional de Mérida, luego de detectar que el ave era transportada de manera ilegal dentro de un embalaje de madera, presuntamente con fines de tráfico de fauna silvestre.
Durante la inspección, personal de la autoridad ambiental constató que el ejemplar presentaba cortes parciales en ambas alas, una práctica que le impide volar y desplazarse con normalidad, y que constituye una infracción a la Ley General de Vida Silvestre al vulnerar el principio de trato digno y respetuoso hacia los animales.
Ante esta situación, el ave fue asegurada y trasladada a una Unidad de Manejo para la Conservación de Vida Silvestre (UMA), donde recibirá atención veterinaria especializada y permanecerá bajo resguardo conforme a la normatividad ambiental vigente.
De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, las cacatúas son aves originarias de Oceanía que requieren condiciones muy específicas de espacio, manejo y socialización, por lo que su tenencia como mascotas es ilegal en la mayoría de los casos y suele derivar en afectaciones graves a su salud física y conductual.
La dependencia ha señalado que prácticas como el corte de alas en psitácidos constituyen una forma de maltrato, ya que alteran de manera permanente su comportamiento natural, generan estrés crónico y reducen significativamente su bienestar, agravando además el impacto del tráfico ilegal de especies protegidas.
Finalmente, la Profepa reiteró el llamado a la ciudadanía a no comprar ni regalar ejemplares de vida silvestre, al advertir que la demanda de estas especies fomenta su extracción ilegal y el deterioro de las poblaciones en su hábitat natural.
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