Armando Zacarías, dueño de la franquicia de la librería Gandhi en San Luís Potosí, incapaz de ser humilde y generoso, fue captado en video cuando corría a un indigente que decidió guarecerse del frío en los Portales Ipiña, justo afuera de la sucursal de la librería ubicada en ese edificio del Centro Histórico.
En la grabación aparece el hombre en situación de calle tapado con algunas cobijas, sobre unos cartones que le sirvieron de cama la noche anterior, donde habría pasado la noche del 3 de enero. El aspecto del hombre incomodó al empresario y ex funcionario, de manera que llamó a un policía para solicitarle que se retirara del lugar.
Zacarías le explica al agente la incomodidad que le representa a él y a su negocio el indigente, inclusive da dos pasos atrás para impedir algún roce con la persona y le dice: “Si me entendió”. Se duele de que el indigente se orina en el pasillo de los portales, afectando así tanto la Librería Gandhi como otros establecimientos que operan en diferentes locales que dan a la avenida Carranza y que forman parte del atractivo del Centro Histórico de la capital potosina.
Armando Zacarías fue incapaz de prestarle ayuda al hombre para canalizarlo hacia alguna institución de asistencia social que lo atienda, lo bañen, lo vistan, lo alimenten y lo instalen en algún albergue, mientras se define su condición de salud y se busca a sus familiares si los tuviera, simplemente no lo quería por el mal aspecto y olor.
Al final del episodio el indigente se retiró por su propio pie, bajo la mirada acechante del policía, sin mediar oposición y sin oponer resistencia. Los cartones fueron retirados por un empleado y el hombre volvió a dormir en la calle.
