Los problemas para Antonio Brown no terminan. El jugador de la NFL fue acusado por una joven llamada Britney Taylor de violación y otras agresiones sexuales, hechos que habrían ocurrido entre 2017 y 2018. Taylor fue entrenadora personal del wide receiver de los New England Patriots y de conformarse dichas acusaciones la carrera de Brown llegaría a su fin.
Excompañera del futbolista profesional en Central Michigan, Taylor ha revelado tres incidentes de violencia sexual: el primero fue un beso sin el consentimiento de la joven, posteriormente, en otra ocasión, Brown se habría masturbado en la misma habitación donde se encontraba ella y finalmente una violación ocurrida en 2018.
La denuncia describe las tres situaciones en especial la de mayo de 2018 cuando Brown forzó a la joven a tener relaciones sexuales. «Ella trató de resistirse, gritando que parara y que no lo hiciera», establece el documento que fue consultado por The New York Times, que reveló el tema. Taylor emitió un comunicado en el cual da a conocer su postura. «Como víctima de Antonio Brown decidir hablar ha sido una decisión increíblemente difícil. He encontrado fuerza en mi fe, mi familia y en relatos de otros sobrevivientes de agresión sexual». Hasta la mañana de este miércoles ni la NFL ni el jugador habían fijado su postura sobre el tema.
Hace dos semanas se dio a conocer un incidente de Brown con el gerente general de los Raiders de Oakland, Mike Mayock, que casi le cuesta una suspensión. Posteriormente hizo una campaña en redes sociales para que los Raiders los liberaran y pudiera jugar con otro equipo hasta que finalmente logró contratarse con los Pats.
Con información de Mediotiempo
