
El sector porcino español, el más grande de la Unión Europea, enfrenta una crisis tras detectarse un brote de peste porcina africana (PPA) en la región de Barcelona, lo que llevó a países como México, China, Taiwán, Japón y Estados Unidos a suspender de inmediato las importaciones de productos porcinos provenientes de España.
Hasta ahora se han identificado 13 jabalíes infectados en Collserola del Vallés. Autoridades sanitarias confirmaron que se trata de PPA, una enfermedad altamente virulenta y letal para cerdos y jabalíes, sin impacto en humanos pero con gran capacidad de persistir en el ambiente. España no enfrentaba un brote desde 1994.
El gobierno español alertó sobre un posible origen inusual del virus. Un informe del Ministerio de Agricultura señala que la cepa detectada es similar a la registrada en Georgia en 2007, por lo que su procedencia podría estar vinculada a un laboratorio. La policía catalana no descarta que el virus haya salido de una instalación de bioseguridad cercana al foco.
El brote pone en riesgo un sector económico clave: el cerdo representa más de 39 por ciento de la producción ganadera del país y tiene un valor anual superior a 11 mil millones de euros. España cuenta con 34.6 millones de cabezas de ganado y exporta más de la mitad de su producción.




