Durante las olas de calor, el consumo de agua embotellada se dispara, pero esta respuesta inmediata revela un problema estructural, la infraestructura urbana no está preparada para temperaturas extremas.
A diario se desechan más de 21 millones de botellas plásticas en México, y el calor convierte ese plástico en una amenaza silenciosa, liberando toxinas que afectan la salud, según la Secretaría de Salud. Urge repensar cómo accedemos al agua potable de forma segura y sostenible.
En este contexto, Somos PURA recomienda 4 acciones para enfrentar el desafío del calor extremo con menor impacto ambiental:
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Reducir el tiempo de uso de agua en actividades como duchas y llenado de piscinas.
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Evitar productos desechables y preferir utensilios reutilizables en exteriores.
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Usar termos con filtro integrado para evitar botellas de plástico.
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Instalar sistemas de purificación de agua en casa, eliminando la dependencia de garrafones.
Seguiremos informando.
