La fiesta de cumpleaños del controvertido presunto líder social Pedro Torres dejó ver la reconciliación entre el alcalde capitalino, Xavier Nava Palacios, y el secretario general, Sebastián Pérez, quien a media semana amenazó con renunciar al cargo, celoso del gran despliegue a favor de Oscar Valle Portilla, director de Desarrollo Social, perfilado como el candidato neonavista a la presidencia municipal en el 2021.
Una quinta, propiedad de Pedro Torres, fue el lugar del convivio en el que el festejado fungió como Cupido, en esta nueva etapa de amor y amistad entre Sebastián y Xavier.
La impresionante propiedad del líder social está ubicada camino a Cerro de San Pedro. Ahí se colocaron mesas que lucieron manteles blancos para servir el tradicional mole rojo acompañado con frijolitos y arroz, tortillas bien calientes, cerveza victoria, squirt, y para los invitados vip, vino tinto.
Pedro Torres, consentido del Gobierno y del Ayuntamient,o sentó en la mesa principal, además del alcalde y del secretario Sebastián Pérez, a Aureliano Gama, poderoso subsecretario de Gobierno, financiador de grupos de choque y compadre del senador del MORENA, Primo Dothé.
No podían faltar los sicarios del alcalde, atendidos ahora a operadores políticos, gracias al curso que Aureliano Gama les patrocinó a través de los voceros de Gobierno del Estado y del Congreso, para que se sepan expresar y comportar en público, para que mejores su imagen, se bañen, vistan decentemente y disfracen el aliento con un chicle de menta o de eucalipto.
Carlos Romero, director de Desarrollo Político, también estuvo en el comite, muy alegre y muy sonriente como buen huasteco, a quien en tono de broma le dicen que con esos cursos a los septuagenarios pseudo líderes sociales, le está haciendo un buen al Estado, pues cuando caigan en algún asilo ya no serán tan agresivos.
Xavier Nava se puso en modo simpático para saludar a las huestes de Pedro Torres, pero no a todos les encantó saludarlo, sus colonias siguen sin servicios, anegadas, sin alumbrado público, en la pobreza, la basura y la inseguridad.
Es tan grande la finca de Pedro Torres, que hubo lugar para todos, pero en la mesa vip, solo funcionarios y sicarios.
Sebastián Pérez lucía sonriente, pero discreto, todavía no le perdona al alcalde la traición que lo ha llevado a promover a Oscar Valle como su sucesor a quien esta vez cuidaron de no pasear en el cumpleaños.
Pedro Torres se fue al Barbers Spa. A sus 50 luce como de 60, pero con el pelo recortado, nada que ver con el Pedro que liderea manifestaciones en el Congreso del Estado, en Mexquitic o contra los gallardistas, nunca contra el Gobierno ni contra el alcalde Xavier Nava. Se puso un pantalón de mezclilla limpio, lució un suéter azul y una chamarra de mezclilla. Su esbelta figura hacía contraste con la del subsecretario que va que vuela para ser protagonista del programa Kilos Mortales.
Todo fue dicha y felicidad, buenos deseos para Pedro. Los que llegaron crudos se la curaron, los que no comenzaron a despedir el mes de junio y el alcalde abonó a su reconciliación con Sebastián “que la mano de Pedro resulte buena para la reconciliación”.
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