La presidenta Claudia Sheinbaum anunció que en 2026 presentará una reforma constitucional y legal para reducir la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas. El cambio se aplicará de manera gradual a partir de 2027, con una disminución de dos horas por año hasta completarse en 2030.
El secretario del Trabajo, Marath Bolaños, señaló que alrededor de 13.4 millones de trabajadores laboran 48 horas semanales y ellos serán los beneficiados directos de la medida. Explicó que 2026 será un año de transición para que empresas, sindicatos y centros de trabajo ajusten sus procesos antes de iniciar la reducción escalonada.
Sheinbaum reconoció que las negociaciones no fueron sencillas: algunos sindicatos pedían implementar las 40 horas desde 2026, mientras que sectores empresariales se oponían totalmente al cambio. No obstante, afirmó que la experiencia internacional demuestra que jornadas más cortas aumentan la productividad y no generan costos adicionales para las empresas.
La mandataria destacó que el consenso logrado se suma a otras reformas laborales recientes, como la ampliación de vacaciones y la eliminación del outsourcing. Bolaños agregó que la aplicación gradual responde a recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo y que la reducción de horas favorecerá la salud y el bienestar de los trabajadores.
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