Las intensas lluvias registradas durante la última semana en la Huasteca potosina, ocasionadas por la coincidencia de los ciclones “Raymond” y “Priscilla”, provocaron graves inundaciones que obligaron a evacuar a más de mil 300 familias en distintos municipios de la región.
De acuerdo con la Coordinación Estatal de Protección Civil, mil 360 familias fueron trasladadas a albergues temporales donde reciben alimentos, atención médica y apoyo psicológico. Aunque las labores de auxilio y limpieza se mantienen, varias comunidades, como Huehuetlán, continúan anegadas y con dificultades para restablecer el tránsito y los servicios básicos.
El Plan DN-III-E sigue activo en municipios como Axtla de Terrazas, Tamazunchale, Tancuayalab, San Martín Chalchicuautla, Xilitla y Tanquián de Escobedo, donde personal del Ejército, Protección Civil y autoridades estatales realizan tareas de rescate, limpieza y entrega de suministros.
Las lluvias provocaron cientos de viviendas dañadas, al menos 25 derrumbes y el desbordamiento de cuatro corrientes en distintos puntos de la Huasteca. A pesar de la magnitud de los daños, no se han reportado pérdidas humanas.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que los ríos Moctezuma, Amajac, Axtla, Tampaón y Gallinas permanecen por encima de sus niveles críticos, lo que mantiene el riesgo de nuevos desbordamientos si las precipitaciones continúan.
Las autoridades estatales y municipales reforzaron las acciones de apoyo en las zonas más afectadas, con énfasis en la limpieza de caminos, el restablecimiento de servicios y la distribución de ayuda humanitaria para las familias desplazadas por las inundaciones.
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