
Familiares de las víctimas de la explosión de una pipa de gas LP en el puente de La Concordia, en Iztapalapa, mantienen guardias en hospitales y realizaron protestas para exigir atención médica y reparación del daño.
La Secretaría de Salud de la Ciudad de México informó que 13 personas han muerto, 40 permanecen hospitalizadas y 30 han sido dadas de alta. Entre los heridos graves se encuentra Erick Vicente Acevedo Moreno, chofer de microbús que salvó a sus pasajeros antes de resultar gravemente quemado.
Algunos pacientes han sido dados de alta pese a presentar quemaduras, lo que ha generado críticas de familiares que buscan atención médica adicional. La Coordinación de Atención a Víctimas de la Fiscalía capitalina apoya a los familiares en la integración de pruebas para la reparación del daño y en la investigación por homicidio, lesiones y daños.
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