
Domingo 3 de agosto.- Un reciente descubrimiento paleontológico ha dejado atónitos a los científicos: se trata del Mirasaura grauvogeli, un pequeño y enigmático reptil que vivió hace aproximadamente 247 millones de años, durante el periodo Triásico, es decir, antes de la aparición de los dinosaurios. El fósil fue analizado por un equipo internacional de paleontólogos y publicado en la revista Nature.
La existencia de estas estructuras en un grupo tan antiguo sugiere que las adaptaciones genéticas necesarias para producir apéndices complejos como plumas o pelo podrían haber estado presentes desde etapas muy tempranas en la evolución de los vertebrados. Este descubrimiento podría obligar a reescribir parte de lo que sabemos sobre la evolución de la piel y sus derivados.
Para Stephan Spiekman, autor principal del estudio, los drepanosaurios como Mirasaura representan un verdadero desafío a nuestra visión tradicional de los reptiles:
“Estos extravagantes trepadores están cambiando la imagen de lo que es un reptil”.
El hallazgo del “reptil milagroso” no solo amplía nuestro conocimiento sobre los animales prehistóricos, sino que abre nuevas posibilidades para el estudio de la evolución temprana de las estructuras tegumentarias y el desarrollo de la biodiversidad. Un recordatorio de que, en el mundo de la paleontología, aún quedan muchas sorpresas por descubrir bajo las capas del tiempo.