Soledad de Graciano Sánchez, SLP.- La Guardia Civil Municipal aseguró por tercera vez en menos de dos meses a Alexis Geovani “N”, alias “Venom”, un individuo ampliamente conocido en la zona por su historial delictivo y reincidencia en actos violentos. El sujeto fue detenido tras amenazar con un cuchillo a un ciudadano durante un intento de asalto en avenida Matehuala.
De acuerdo con el reporte oficial, “Venom” habría intentado despojar de su teléfono a un transeúnte bajo la amenaza de matarlo. La rápida intervención de los elementos municipales permitió su detención, aunque el sospechoso opuso resistencia e intentó agredir físicamente a los oficiales.
Durante la revisión, se le encontraron 14 envoltorios con una sustancia similar al cristal, con un peso de 6.09 gramos, y un cuchillo metálico de 8 centímetros de hoja. Posteriormente fue trasladado a la Comandancia Central, donde fue certificado por personal médico, quien confirmó consumo crónico de cristal y marihuana.
Alexis Geovani “N”, de 25 años, ha sido detenido al menos ocho veces desde 2020 por delitos como narcomenudeo, portación de armas prohibidas, robo con violencia a planteles educativos y tiendas de conveniencia, principalmente Oxxo. Sus capturas recientes, el 11 de mayo y el 24 de junio, ocurrieron bajo circunstancias similares: posesión de drogas, armas blancas y agresiones.
La reincidencia delictiva de este sujeto ha generado indignación en la corporación y entre la población. Comerciantes, estudiantes y familias residentes de colonias como La Constancia han denunciado sentirse en constante riesgo por su presencia y actividad criminal.
Desde la dirección de la Guardia Civil Municipal se lanzó un enérgico llamado a las autoridades del sistema judicial, señalando que no basta con las detenciones si los responsables de múltiples delitos son liberados una y otra vez. La exigencia es clara: que se aplique la ley con firmeza para proteger a la ciudadanía frente a individuos que reiteradamente atentan contra la seguridad pública.
El sujeto permanece bajo resguardo en espera de su puesta a disposición ante la Fiscalía General del Estado. La población espera que, esta vez, su historial pese lo suficiente para que enfrente las consecuencias legales de manera definitiva.
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