Aficionados llenaron un estadio de fútbol con osos de peluches para conmemorar la memoria de los niños que fallecieron en el sismo de Turquía, además, los responsables señalan que también se tiene la intención de alegrar a los menores que perdieron sus casas donando todos los juguetes que se lograron reunir.
La noble causa detuvo el enfrentamiento entre el Besiktas y el Antalyaspor al minuto cuatro con 17 segundos, esto para que se coincidiera con la hora en la que comenzó el terremoto que afectó a Siria y Turquía. En ese momento todos los asistentes comenzaron a arrojar peluches al estadio como un donativo para aquellos niños que sufrieron una perdida.
A la causa se sumaron jugadores y personal del estadio, quienes comenzaron a reunir los peluches para cumplir con el objetivo de entregárselos a los afectados.
