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Apapacha Gallardo a funcionarios estatales con mega posada

* El gobernador aprovecha para pedir al equipo que redoble esfuerzos para entregar mejores resultados a los potosinos

Bien consentidos quedaron los funcionarios del Gobierno del Estado con la posada que les organizó el gobernador Ricardo Gallardo Cardona en donde, luego de darles su apapachada, les reiteró el llamado para que redoblen esfuerzos y busquen la manera de entregar mejores resultados a los potosinos.

Al llamado acudieron los titulares de todas las dependencias, así como directores y algunos funcionarios de segundo y tercer nivel que fueron recibidos con un variado desayuno que incluyó un plato de papaya y quesitos de Carranco y panela. Como plato fuerte, se les ofreció omelette con frijoles refritos y aguacate o chilaquiles para la cruda. La variedad de bebidas estuvo compuesta por café, agua y jugo verde.

Tras la felicitación y el reconocimiento, Ricardo Gallardo tomó la voz para insistir en la necesidad de que el funcionariado no se eche en sus laureles, sino que, por el contrario, redoble el paso para atender las demandas que tienen los potosinos y que, siguiendo su ejemplo, trabajen 17 horas al día.

Lupe Torres también mostró su poder y, con la elocuencia que tanto lo caracteriza, secundó las palabras del gobernador insistiendo en la necesidad de que cada área cumpla con lo que le corresponde para que toda la estructura funcione. Aunque nadie se lo pidió y no tenía motivo para hacerlo, el oficial mayor, Noé Lara Enríquez, también se dirigió a los presentes y, como si se tratara del abuelito de la casa, les pidió a todos que se cuidaran, que se abrigaran, que no tomaran tanto y que se portaran bien.

Gallardo

Ya de pilón, entró al quite el titular de la SEDESORE, Ignacio Segura Morquecho. Con una porra y batucada, el secretario demostró que traía con queso las enchiladas, pero el gobernador le bajó los humos refiriendo, entre broma y verdad, que con eso no le alcanzaba ni para una diputación.

Sin querer llamar la atención, el secretario de Desarrollo Económico, se convirtió en el objeto de deseo en varias ocasiones cuando multitudes de funcionarias le pedían la foto del recuerdo. Siempre amable, aceptó todas las peticiones, aunque fue de los primeros en retirarse porque «tenía muchas cosas que hacer».

Ya para despedirse, a todos los presentes se le dio como regalo de navidad una cajita que contenía una botella de vino tinto de Baja California, como si en San Luis no hubiera, además de dos rones Potosí para que celebren a gusto con sus familias, amigos o quien quieran.

Seguiremos informando.

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