El Interapas ha encontrado en el tema del agua potable la oportunidad perfecta para hacer negocio y sangrar a la ciudadanía aprovechando la escasez, el desabasto y los problemas de distribución que se registran en San Luis Potosí, Soledad de Graciano Sánchez y Cerro de San Pedro y es que, según denuncian, han logrado conformar toda una mafia de piperos que lucran con la necesidad de los potosinos a quienes venden un servicio que debería ser gratuito, sobre todo, ante la creciente demanda por la contingencia sanitaria que exige el fortalecimiento de las medidas de higiene personal y de áreas comunes.
Ramón Farías Ortega, allegado a Xavier Nava Palacios y nombrado director de Administración y Finanzas del Interapas, sería el comandante de esta perversa mafia conformada luego de despedir a los trabajadores que se desempeñaban en estas áreas con la finalidad de meter a gente de su entera confianza, a los anteriores los despidieron acusándolos de malgastar los recursos y robar gasolina de los vehículos.
Ya con su equipo renovado y por supuestas órdenes del alcalde, Farías Ortega dio nuevas indicaciones; se tendría que reportar una cantidad de dinero específica cada cierto tiempo, el recurso iría a dar al cochinito que, más adelante, se usaría para financiar la campaña de Xavier Nava rumbo la gubernatura, todo ello, a costa de abusos y atropellos en contra de los potosinos. Juan Eduardo Martínez Oviedo, titular de la Unidad Jurídica; Jorge Carlos Vivanco, director de Operación y Mantenimiento y Alejandro Lara, el supuesto coordinador de pipas, complementarían la estructura de esta maquiavélica organización.
Estas tranzas, según afirman, fueron descubiertas en su momento por José Manuel Martínez Guiza, tío de Xavier Nava, quien, al intentar denunciar la situación y contarle a su sobrino sobre lo que sucedía, defendió plenamente a Ramón Farías rompiendo todo lazo familiar y echándolo del organismo por considerar que ya no era una persona en la que se podía confiar y quien, evidentemente, no se prestaría a las corruptelas que se estaban generando en el Interapas.
Pese a que su prioridad es sangrar a los potosinos, Ramón Farías se da el tiempo para el amor con una empleada del Interapas a quien ha favorecido con pipas gratuitas en una propiedad privada ubicada en las cercanías de Plaza San Luis, primero, una pipa diaria durante seis meses para construir su casa y, ahora, una pipa cada tres días para uso doméstico, servicio que, claramente, no le representa gasto alguno.
Con el control completo del Interapas y el director general, Ricardo Fermín Purata, haciéndose de la vista gorda, los integrantes de esta mafia no sólo lucran con el servicio sino que, también, han encontrado beneficios personales pues, ahora, por medio de un perfil de apellido Fernández, nombrado «jefe exclusivo de carga de combustible», aprovechan para cargar vehículos privados, personales y de familiares con cargo a las finanzas del Interapas.
Mientras que San Luis Potosí está siendo azotado por la pandemia y miles de potosinos en la capital, Soledad y Cerro de San Pedro no tienen agua, esta mafia sigue sacando provecho y beneficio para sí mismos sin dar respuesta ni atender las demandas de la poblacion.
Seguiremos informando.
